Educación

Cómo tener una relación saludable con la comida

Stefy Fernandez

Dietista nutricionista

@stefyactiva

La mayoría de las personas conocen bien qué incluye una alimentación saludable. Además, constantemente están siendo bombardeados con lo que "deberían" y "no deberían” comer. ¿Pero qué hay de la relación que tienen con la comida? 

Trabajando como nutricionista durante 7 años he conversado con mucha gente sobre la comida. La mayoría de las personas conocen los conceptos básicos de una alimentación saludable, con algunas excepciones, pero cuando se trata de nuestra relación con los alimentos, la mayoría de las personas ni siquiera lo ven como algo importante. 

La relación saludable con la comida y con el ejercicio fomenta un bienestar integral, no sólo físico si no también mental

 

y realmente comer sano y ya, no es sinónimo de salud, hay muchísimas variables más que incluyen este concepto. 

Y es que algo que se olvida mucho es que la nutrición va mucho más allá del simple comer. A pesar de que la alimentación puede ayudar a evitar o disminuir enfermedades, también es cierto que puede causar estrés, frustración, insatisfacción corporal, y una lucha interna en muchas personas. 

Por esa razón, aquí te doy ciertos consejos que pueden ayudarte para que desarrolles una buena relación con la comida

  • Céntrate en agregar, no en todo lo que tienes que eliminar: no te enfoques en lo que no puedes comer, en los alimentos “prohibidos”, ya que esto sólo hará que los anheles más. Comienza a pensar en todos esos alimentos que vas a agregar en tu alimentación diaria como frutas, verduras, semillas, legumbres, frutos secos, etc. 
  • Ten cuidado con las reglas: La estructura y las reglas pueden ayudar a sentir más seguridad y con mayor control sobre una alimentación en exceso. Sin embargo, ser muy estricto con estas reglas es cuando puede generar frustración y fracaso si alguna de ellas no se cumple. - No etiquetes los alimentos: esto quiere decir que no existe una clasificación de alimentos buenos y alimentos malos, ni alimentos que engordan ni alimentos que adelgazan. Todos los alimentos se pueden ajustar en tu alimentación, siempre habrá aquellos que tengas que reducir, pero no obligatoriamente eliminar de por vida. Ten en cuenta que un alimento no te define. 
  • Pregúntate por qué estás comiendo: Por aburrimiento, por estrés, por antojo, por hacer feliz a otra persona. Y luego pregúntate cómo lo estás haciendo, rápido sin masticar, sin pensar, sin sentarte, te sientes culpable, etc… Estas preguntas pueden conducir a grandes cambios en la forma de comer alimentos y comenzar con una rutina que a largo plazo te haga sentir mejor. 
  • Come alimentos que disfrutes, no te obligues a comer aquello que sólo porque es saludable. Elije entre los que más te gustan y disfruta sus diferentes preparaciones. 
  • No “compenses”: esto quiere decir, que si consumiste algo que no era tan saludable y era muy calórico durante muchos días, no tienes por qué compensar y empezar a beber zumos détox para compensar la alimentación poco saludable que tuviste. Simplemente comienza a retomar tus hábitos saludables poco a poco. 
  • Escucha y confía en las señales de tu cuerpo: Hambre y saciedad: Cuándo parar de comer si sientes ya una sensación leve de llenura, y cuándo comer, si sientes un vacío en el estómago. Y siempre sin juzgar tus decisiones sobre lo que escojas para comer. 

¡Intenta que la comida no se convierta en lo más importante de nuestras vidas!